Deja …
Deja que las estrellas aniden,
En las ramas de tu ser,
Que el susurro del viento
Bese la tierra que pisas.
No te pido más que sueños,
Pero en ellos quiero vivir.
Sé el río en mi desierto,
Seré el árbol en tu pradera,
Sombra y raíz en mi mitad.
Si ves mis hojas marchitar,
Derrama tus lágrimas celestes,
Y del suelo brotaré.
No partas en el invierno,
Siguiendo aves al horizonte,
Más allá del bosque oscuro.
Quiero elevarme contigo,
Ser el cielo y el roble,
Aprender de ti a volar.
Sé la luna que me guía,
Sé el fuego en mis noches frías,
Ardiendo en lo profundo.
No deseo más soledad,
Ni despertar sin tu calor,
Sólo sueños hechos realidad,
Rodeados de ecos lejanos,
Que canten nuestros nombres,
Ofreciendo sombra y paz.
Y cuando volvamos a la tierra,
Que nuestras raíces se entrelacen,
Dando vida al árbol del amor.