Desaprender, a veces la vida nos pide olvidar
lo que creíamos certeza,
para abrir los ojos
y dejar que la naturaleza nos susurre su verdad.
Beber donde el caballo bebe,
pues nunca él tocará agua impura,
pero la pobre vaca no conoce esa lección.
Dormir donde el gato reposa en calma,
pues su alma lee las ondas secretas
que la Tierra murmura en su regazo.
Comer la fruta que un gusano probó,
porque su tacto es certeza
de tierra viva y sin veneno.
Buscar los hongos donde los insectos descansan,
pues ellos saben que los mortales no son amigos de la muerte.
Cavar un pozo donde el pájaro se esconde del sol,
pues allí el agua espera paciente
bajo la piel del mundo.
Seguir el ritmo del sol,
trabajar con su fuego y descansar en su ocaso,
como lo hacen las gallinas,
y cosechar así los granos dorados de la vida.
Comer verde, tan verde como el bosque,
para ser fuerte como sus raíces
y resistente como su alma.
Mirar más al cielo y hablar menos,
para que el silencio te encuentre,
para que la paz anide en tu espíritu
y tu vida florezca en armonía.
Desaprender para poder aprender ✨